EL MOTÍN DE AREQUITO (08/01/1820)

Una parte del Ejército del Norte, al mando del Coronel JUAN BAUTISTA BUSTOS (imagen), se sublevó en Arequito (localidad del actual Departamento Caseros, provincia de Santa Fe) negándose a continuar la marcha para combatir a los caudillos federales ESTANISLAO LÓPEZ y FRANCISCO RAMÍREZ.

Un hecho que sin duda, contribuyó en lo inmediato a la  caída del gobierno de Buenos Aires y en lo mediato, al triunfo, aunque con algunas alternativas de las ideas federales en la República Argentina.

El ejército del Norte, que fuera conducido exitosamente por el general MANUEL BELGRANO, en las batallas de Salta y Tucumán, ahora al mando del general FERNÁNDEZ DE LA CRUZ, amenazado en su marcha por los caudillos ESTANISLAO LÓPEZ y JOSÉ GERVASIO DE ARTIGAS,  marchaba en dirección a la provincia de Córdoba, en cumplimiento de las órdenes impartidas por el Director Supremo JOSÉ RONDEAU.

El 6 de enero alcanza la “Posta de Arequito”, con la intención de seguir hacia Buenos Aires, y ordena el descanso de la tropa. Aprovechando esta situación, la noche del 7 de enero, el coronel JUAN BAUTISTA BUSTOS jefe del Estado Mayor de esa columna, se subleva con gran parte de la oficialidad y de esas tropas, aduciendo que no estaba dispuesto a seguir “combatiendo contra los caudillos en esta guerra fraterna que se nos impone”.

En la madrugada del 8 de enero toma prisioneros al general DE LA CRUZ y a varios jefes y oficiales que permanecían leales a éste, parlamentó un cese de las hostilidades con los caudillos LÓPEZ y ARTIGAS y marcha luego con sus tropas hacia Córdoba, donde asumió la gobernación de esa provincia. El general DE LA CRUZ, sin poder oponerse a los sublevados, regresa a Buenos Aires y así comienza el lamentable período de la Historia Argentina, conocido como «la anarquía” (ver La anarquía de 1820 en la Argentina).

Antecedentes
En 1819, los caudillos JOSÉ GERVASIO DE ARTIGAS y ESTANISLAO LÓPEZ unidos al chileno JOSÉ MIGUEL CARRERA, habían desconocido al gobierno nacional, y en son de guerra invadieron la provincia de Buenos Aires, que permanecía fiel a la autoridad del Director Supremo, general JOSÉ RONDEAU.

Éste, que no tenía fuerzas suficientes para defender la capital ni para escarmentar a los invasores, decidió involucrar estos efectivos para doblegar la resistencia que le oponía la provincia de Santa Fe y para ello, ordenó a los ejércitos de los Andes y auxiliar del Alto Perú que, sin pérdida de tiempo, bajasen a Buenos Aires para “salvar al país de la anarquía”.

SAN MARTÍN desobedeció estas órdenes, declarando que jamás intervendría en contiendas civiles y asumiendo la responsabilidad de sus actos, se dedicó a ultimar su expedición al Perú (Ver La desobediencia de San Martín).

Pero el ejército del Alto Perú, que ya no mandaba MANUEL BELGRANO sino que estaba bajo las órdenes del general FRANCISCO FERNÁNDEZ DE LA CRUZ y el coronel mayor JUAN BAUTISTA BUSTOS, como Jefe de Estado Mayor, acató lo dispuesto por el Director Supremo.

Reemprendió la marcha hacia la capital y el 8 de enero de 1820 llegó a la Posta de Arequito, en las costas del Río Carcarañá (Santa Fe). Y allí, estimulados e inspirados por los sucesos producidos en Tucumán el 10 de noviembre del año anterior, que provocaron la caída del gobernador MOTA BOTELLO y la instalación de la República de Tucumán, el coronel mayor JUAN BAUTISTA BUSTOS, acompañado por el coronel ALEJANDRO HEREDIA y el comandante JOSÉ MARÍA PAZ,  sublevaron a los Regimientos de Dragones y de Húsares y a los Regimientos 2 y 10 de infantería, que constituían la mayor parte del Ejército del Norte.

Estos tres jefes, lograron la adhesión de estos veteranos combatientes, declarando que no aceptaban continuar con los enfrentamientos que imponía la guerra emprendida por el gobierno de Buenos Aires para consolidar su hegemonía y que se negaban a participar en las rencillas del Directorio, sustrayéndose de su verdadero deber, que era la expulsión de los realistas.

Pero la historia ha demostrado después, que la verdadera razón que fundamentó este movimiento, fue que los cabecillas del motín  no aceptaban la orden de  combatir contra ESTANISLAO LÓPEZ, caudillo de Santa Fe, alzado contra el poder central y aliado de Bustos en su lucha contra Buenos Aires.

El comandante JOSÉ MARÍA PAZ dio la señal de la sedición y el general Bustos, cuando ya estuvo en marcha el movimiento, fue a la tienda del general de la Cruz, que dormía tranquilamente y le despertó, diciéndole: “Levántese compañero, que en el ejército hay gran movimiento”.

DE LA CRUZ envió un ayudante a preguntar qué movimiento era aquél y por orden de quién se había ejecutado, a lo que se le contestó, diciendo: Que aquellos cuerpos se separaban del ejército, pues no querían continuar haciendo la guerra civil.

Al día siguiente, luego de producidos algunos episodios dolorosos y ante la imposibilidad de someter a las fuerzas sublevadas, el general FERNÁNDEZ DE LA CRUZ, viéndose impotente para restablecer la disciplina, y decidido a evitar el derramamiento de sangre entre hermanos, resignó el mando, entregando el ejército a Bustos,

BUSTOS, dueño ya del mando de esas fuerzas, retrocedió hasta Córdoba, no sin antes rechazar proposiciones de los caudillos del Litoral, para que esas tropas fueran empleadas contra los efectivos de Buenos Aires.

Llegado a Córdoba, fue recibido triunfalmente y luego de deponer al gobernador MANUEL ANTONIO CASERO se hizo nombrar Gobernador. La íntima idea de BUSTOS era hacer de Córdoba una base de poder, a partir  de la cual, pudiera establecer la paz entre las provincias.

BUSTOS creyó que su acción  neutralizaría las fuerzas de los caudillos, así como la de  RONDEAU, pero esto no fue así. Porque la sublevación de Arequito, fue la primera chispa que llevó la desorganización a muchas provincias, pues la actitud de BUSTOS fue imitada por otros caudillos provinciales.

Dos días después de producida la sublevación de Arequito, PEDRO JUAN GONZÁLEZ le escribe a su pariente, el teniente gobernador de La Rioja, coronel GREGORIO JOSÉ GONZÁLEZ, una extensa carta en la que le expresaba los pormenores de los sucedido, indicándole al mismo tiempo lo que tenía que hacer para mantenerse en el cargo. Pero la rapidez con que obraron sus adversarios dio lugar a que éste también fuera depuesto en la noche del 24 de enero de 1820.

El territorio de La Rioja que dependía de la jurisdicción de Córdoba, viendo el trastorno que se había producido en esta provincia a causa de aquel acontecimiento, liderada por DIEGO DE BARRENECHEA, lo usó como pretexto para proclamar su autonomía y declarar a su territorio provincia argentina independiente, siendo seguida en tal postura por varias otras provincias que declararon rotas sus relaciones políticas con Buenos Aires.

Como fue el caso de la provincia de Santiago del Estero, liderada en su rebelión por JUAN FELIPE IBARRA y el de la provincia de San Luís, cuyo caudillo, VICENTE DUPUY proclamó su soberanía.

JUAN BAUTISTA BUSTOS jefe del Estado Mayor de las unidades sublevadas e irreconciliable enemigo de FERNÁNDEZ DE LA CRUZ, pasará a la historia como el instigador de esta acción, que marca el comienzo del fin del gobierno nacional”. Dos días después, de producida la sublevación, como el general DE LA CRUZ  fuera atacado por los montoneros santafesinos, gran parte de las unidades sublevadas, concurrieron en su auxilio, uniéndose nuevamente al grueso del ejército nacional.

“El motín de Arequito, dice el general MITRE,  arrebató a la nación el único ejército regular de que disponía; dejó desarmado al gobierno nacional y a la nación entregada a los vaivenes de la anarquía” (ver Revoluciones, motines y sublevaciones).

5 Comentarios

  1. Anónimo

    Se percibe un rancio aroma aporteñado en la redacción el articulo.

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    1. Anónimo

      Por que?

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  2. Anónimo

    que region dominaba cada caudillo?

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  3. Anónimo

    Totalmente unitario el comentario, Bs As, se autodeclaraba Capital, con Rivadavia que no tenía ninguna representatividad en el interior, el mismo que dijo que San Martín se había robado un ejercito, este hecho dejo bien en claro como son las cosas, son las provincias que ceden su representatividad a la capital

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  4. Guillermo

    Totalmente unitario el comentario, Bs As, se autodeclaraba Capital, con Rivadavia que no tenía ninguna representatividad en el interior, el mismo que dijo que San Martín se había robado un ejercito, este hecho dejo bien en claro como son las cosas, son las provincias que ceden su representatividad a la capital

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